Dalia Grybauskaite fue electa el 17 de mayo como la primer mujer presidenta en Lituania con el 69.05% de los votos. Se postuló como candidata independiente a las elecciones de su país. Mujer con amplia experiencia político-diplomática y con presencia internacional, fue Comisaria para Presupuesto en la Comisión Europea.
Más allá del contexto específico en Lituania y de su posición en Europa, la presencia de una mujer en la posición política máxima de una nación es un tema importante a considerar en la agenda en los países del Este europeo y en la agenda global de género.
Veamos qué otras sorpresas nos traen las elecciones en los diversos países en los que hay comicios este año.
8 comentarios:
Me parece estupendo que una mujer acceda a espacios de poder. Creo que es una forma de cambiar la precepción que se tiene sobre las cualidades de las mujeres. Pero no festejaría sólo por el hecho de que sea fémina sino por lo que pueda hacer como ejemplo de políticas limpias y eficientes. Por este lado del mundo tenemos ya en Argentina un caso que da vergüenza. Un manejo político de terror y una frivolidad -tipificada como femenina y reiterada ahora- en el uso desmesurado de dinero ajeno para ropa y botox. Además de demasiado maquillaje en la cara, francamente.
Esta me parece una excelente noticia!
Este es un asunto que me llega de verdad, necesitamos mas mujeres en estos puestos y es una pena que en un pais como en los Estados Unidos aun consideren que la mujer no esta preparada para ser lider de la nacion.
Que lituania nos ponga el ejemplo y espero ver a muchas mas mujeres en la presidencia antes de morir.
Es una gran noticia, aunque poco a poco deja de ser noticia, por lo menos en Europa, donde los casos más conocidos de Thacher y Merkel abrieron y abren futuras puertas...
Hace tiempo tuve un debate entre lo que somos capaces de lograr y no, obviamente con un hombre"", y hubo un momento que me pregunto porque si las mujeres somos como yo decia capaces de todo no habia mujeres presidentas, porque no estaban en el poder"", despues de unos segundos mi respuesta fue que desgraciadamente para llegar a ese lugar entre tanto macho, y soberbia, y muchas cosas mas sucias, solamente un hombre que es menos sensible e incluso masfacil de hacer de lado sentimientos, y estaba por encima la sed de ser mas que los demas, que era capaz de matar a quien sea, y como el sistema es corrupcion, es aplastar... pues por eso mismo, cuando el mundo empieze a cambiar no solo en quienes miramos desde fuera, sino en los que estan ahi dentro del poder, entonces ahi estariamos nosotras, es un orgullo ver que una mujer ha llegado ahi, pero no es solo llegar sino mantenerse con lafrente en alto... mi apoyo y deseos que haga su labor como debe de ser
Marta,
Lo sé, comparto tu punto de visto al 100%. El tema no es que sean mujeres, sino que sean mujeres capaces y congruentes, listas y dispuestas a trabajar a todo vapor a favor de su país y a dejar una huella positiva a su paso.
Gracias por la visita y las palabras.
Aurora,
Yo también me emociono cada vez que una mujer es electa Jefe de Estado (¿te fijas, existe el término Jefe, no Jefa de Estado?).
Pronto tendremos una mujer al frente de otros países como México y Estados Unidos, Canadá... en fin. Pronto no nos sorprenderá, será algo normal y cotidiano.
Duncan,
Es cierto, en Europa hay muestras de ello y felizmente en América Latina también se están abriendo las puertas. En Medio Oriente ya hay antecedentes -Benazir Bhuto (qepd)- siendo uno de los casos, Indira Gandhi y Golda Meier hace ya muchas décadas. En fin.
Gracias por la visita,
Cynthia,
Ese debate también lo he tenido muchas veces, y creo que el punto de partida del mismo es falso. Es una pregunta engañosa el "si son tan capaces, por qué no hay más".
El tema, considero, es un asunto de capacidades y condiciones. Si fuera sólo de capacidades podría hacerse la misma pregunta al revés sin llegar a ningún lado: por qué hay tantos hombres incapaces al frente del poder, si la mayoría son hombres, entonces todos los hombres son incapaces.... y creo que no va por ahí el asunto.
El debate está en un punto sin retorno por varias razones. La estructura de poder en la que vivimos fue una estructuctura construida en un andamiaje claramente patriarcal y respondiendo a la visión masculina del poder. Para competir y participar en él las mujeres hemos tenido que hacer esfuerzos más allá de lo normal y competir bajo estándares masculinos (horarios de trabajo no flexibles, sin consideracion a la familia, en rutinas maratónicas y excluyentes de la vida personal, etc.). Acompañado de esto están también las creencias que nos han acompañado como sociedad en la definición de los roles de las mujeres: estudiar o trabajar mientras se casa, el éxito y desarrollo profesional no es una meta, es antifemenino ser exitosa o ambiciosa (de hecho un hombre ambicioso es bien visto y una mujer es pésimamente vista). A esto se le suma el entrenamiento, el compromiso, la capacitación.
Ser exitosa en lo profesional sigue significando renunciar a muchas otras cosas en la vida personal... y eso no debe ser así. Por ello, insisto, el tema no debe girar en torno a las capacidades sino en torno a las condiciones -inequitativas- en las que se da la competencia para acceder a los puestos de poder. Por ello, tejer una nueva manera de hacer y convivir en la política depende también de lo que las mujeres hagamos para que esto sea diferente.
Acceder al poder implica un esfuerzo personal, no un "otrogamiento" de quien lo detenta. El poder se gana, no se regala.
Un abrazo y gracias por la visita y el comentario.
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